Por ración:
Vaciar un panecillo de Viena abriéndolo desde arriba conservando la tapa, sacando la miga raspando delicadamente con la punta de una cuchara y teniendo en cuenta que ha de facilitar en lo posible que la base del pan quede plana y con precaución de no romper la corteza inferior en lo posible.
Extender en el fondo una rodaja de sobrasada (25 g) empleando el revés de una cuchara, elevando un poco a los lados.
Separar yemas y claras.
Poner sobre la sobrasada la yema rompiendo y extendiendo. Aplicar un poco de la miga extraída para que empape y no gotee al comerlo.
Batir la clara con una pizca de sal, aireándola sin subirla en exceso para que no sobre, especialmente si los huevos son grandes.
Depositar dentro del panecillo la clara levantada y tapar.
Hornear con el horno precalentado a 180 ºC unos 10 min con aire 3D en H2.